Lo primero que hay que hacer es una lista con las cosas por las que te sientes agradecido. Esto cambia tu energía y empieza a cambiar tu forma de pensar, ya que antes es posible que te hayas estado enfocando en lo que no tienes, en tus quejas y problemas. Tienes que estar agradecido por todas las cosas por las que te sientes bien. La gratitud es la forma de atraer más cosas buenas a tu vida. El agradecimiento es esencial. Atrae las cosas. Atrae el apoyo. Todo lo que pensemos y agradezcamos es lo que atraeremos. Todas las mañanas cuando nos levantemos, hay que decir gracias y recordar las cosas por las que estás agradecido, sintiendo profunda gratitud. Así creas con fuerza tu día y todo lo que va a contener, en vez de dejar que el día me controle a mí. Eres el creador de tu vida. Hay que sentir gratitud todos los días incluso por las cosas más pequeñas: por encontrar un lugar donde aparcar, … La gratitud es una forma de vida. El poder de la gratitud está por encima de todo lo demás. Si eres agradecido, más cosas tendrás por las que estar agradecido. No digas pues no tengo la casa, la pareja, el coche… que quiero, sino, enfócate en lo que tienes y da gracias por ello. Los sentimientos y pensamientos que emites cuando no te sientes agradecido son emociones negativas y así es imposible atraer más cosas a tu vida. Y ni que contar si los sentimientos son celos, resentimiento, insatisfacción, … te devolverán más de lo que no quieres. Las emociones negativas impiden que lleguen cosas buenas a tu vida. Si quieres un coche nuevo y no te sientes agradecido por el que tienes, esa es la frecuencia que envías. Te puedes meter una piedra en los bolsillos (la piedra de la gratitud) y cada vez que la toques, agradece todas las cosas que tienes. Cada mañana, siente gratitud por adelantado del gran día que vas a empezar y siente y agradece que ya tienes todo lo que desees.